Curve es una compañía de tecnología financiera que ofrece una plataforma bancaria móvil diseñada para simplificar y unificar la forma en que las personas gastan, envían, ven y ahorran dinero. En lugar de llevar múltiples tarjetas, Curve consolida todas las tarjetas de crédito y débito de un usuario en una sola tarjeta Curve y una aplicación móvil intuitiva. Con esta aplicación, los usuarios pueden cambiar la tarjeta con la que desean pagar, incluso después de que se haya realizado una transacción, utilizando la característica única "Go Back in Time" (Regresar en el Tiempo).
Curve proporciona notificaciones en tiempo real, cero comisiones de cambio de divisas al gastar en el extranjero y ofrece recompensas en efectivo en comercios seleccionados. Su objetivo es ofrecer a los usuarios un mejor control sobre sus finanzas con características como seguimiento instantáneo del gasto en todas las cuentas, herramientas inteligentes de presupuestación y perspectivas sobre hábitos de gasto. La aplicación de Curve también se integra con Apple Pay, Google Pay y Samsung Pay, haciéndola altamente accesible para pagos sin contacto. Además, Curve ofrece servicios financieros adicionales como pagos de persona a persona y la capacidad de "bloquear" la tarjeta Curve instantáneamente a través de la aplicación para mayor seguridad. La plataforma está diseñada para usuarios que buscan una forma más conveniente y moderna de administrar sus tarjetas de plástico con una sola pieza de tecnología más inteligente.
Curve está actualmente disponible para residentes de los siguientes países:
Bélgica, Reino Unido, Francia, Alemania, Países Bajos, España, Austria, Bulgaria, Croacia, Chipre, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Grecia, Hungría, Islandia, Irlanda, Italia, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Malta, Noruega, Polonia, Portugal, Rumania, Eslovaquia, Eslovenia, Suecia
Disponibilidad 24/7 - en cualquier momento, en cualquier lugar
No importa dónde te encuentres, en casa o en el extranjero, puedes acceder a tu cuenta Curve a través de la aplicación, revisar tu saldo, controlar tus ahorros, obtener soporte al cliente, realizar pagos e incluso bloquear tu tarjeta de débito si es necesario. Además, recibe notificaciones en tiempo real cada vez que hagas una transacción, así que no habrá sorpresas al final del mes. No necesitas hacer citas, hacer cola y perder horas de trabajo para gestionar tus finanzas.
Obtén aprobación rápida
Abrir una cuenta con Curve es sencillo, sin necesidad de papeleos extensos. Solo descarga la app, verifica tu identidad, recarga tu cuenta y estás listo para comenzar. Curve no requiere una copia de tu historial crediticio para aprobar tu cuenta, lo que significa que puedes abrir una cuenta y obtener aprobación en minutos.
Comisiones más bajas
Otra de las principales razones para utilizar Curve son sus bajas (¡o nulas!) comisiones. Curve no tiene sucursales físicas, por lo que puede ofrecer comisiones más bajas que los bancos tradicionales, especialmente cuando se trata de retiradas en cajeros automáticos, cambio/transferencia de dinero y pagos en el extranjero. Por ejemplo, Curve no cobra comisiones por ninguna transacción, ¡incluidas las compras en el extranjero!
Facilita los viajes
Curve = banca sin fronteras. Tasas de cambio bajas/nulas y comisiones bajas/nulas por retiros en cajeros automáticos a nivel mundial hacen que viajar sea mucho más fácil (y económico) que con los bancos tradicionales, especialmente en la zona euro. Y para mayor seguridad, bloquea o desbloquea tu tarjeta de débito mientras viajas, directamente en la aplicación.
Sin papeleo
Una de las cosas frustrantes de los bancos tradicionales es la cantidad de documentos, contratos y cartas que se envían a tu buzón de correo. Con Curve todo lo que necesitas está en la aplicación y todas las comunicaciones se envían a tu app o a tu correo electrónico. Se acabaron los días de rebuscar entre montones de papel en tu casa – y proteger el medio ambiente es la guinda del pastel.